Con el aire fresco de la tarde,
las hojas vuelan a su antojo,
se recogen en el duro asfalto
mientras vibra el silbido incesante,
de un soplo dulce......
el Universo.
Energía que emana del cielo,
movimiento dulce siniestro,
partículas en movimiento
ante un trasluz en el cimiento.
Es tu aroma del atardecer,
que contemplo tras tu luz solar,
me impides poder ver
tu mirada risueña, que al caer
el día, un día más,
haces fundir el fuego del mas allá.
A tí, dulce luz solar,
a tí, color del más allá,
Universo inmenso, eres más
que todo aquello que ocupa tu lugar.
Maria jose
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